Vecinos de barrios aledaños de Concepción y de la localidad vecina de Alto Verde denunciaron que los domingos y feriados padecen la falta total del servicio de transporte de pasajeros. La empresa de ómnibus 9 de julio, responsable de cubrir esa zona, desde el inicio de la pandemia del Covid-19 suspendió la circulación de colectivos en esos días. “Los que carecemos de medios propios de movilización y tenemos compromisos de trabajo u otras emergencias quedamos sin poder trasladarnos. Es un verdadero drama para los que usamos el transporte público”, expuso Sergio Corbalán, de Alto Verde. “Los domingos y feriados hasta los transportes rurales dejan de circular. Entendemos que en esos días hay una reducción importante de pasajeros, pero la empresa de colectivos tiene la obligación de garantizar mínimamente el servicio”, añadió.
El problema también genera malestar en los pobladores de los barrios Policial, El Parque, Iltico y Alvear, entre otros.
El director de Transporte de la municipalidad, Osvaldo Schiappacasse, dijo que, aunque la empresa haya desmentido la suspensión del recorrido, hoy mantendrá un encuentro con los propietarios del servicio para recibir una explicación formal sobre lo que estaría sucediendo. “Si los vecinos se quejan es por alguna razón”, apuntó. De todos modos advirtió que profundizaría los controles para hacer cumplir el servicio.
El vecino Andrés Sánchez, del barrio El Parque, observó que el municipio tuvo un sensible crecimiento urbano y poblacional y, sin embargo, el movimiento de colectivos “se mantiene con la misma cantidad y frecuencia de hace años”. “En el barrio Vialidad, la gente carece de colectivos. Y hay personas que trabajan y chicos que van a estudiar. Es uno de los factores que llevó a la proliferación alarmante de motos. Es el único medio de movilidad que tienen algunos vecinos a mano”, planteó por su parte Armando Ismael Díaz, del barrio Policial.
En otras poblaciones del sur también hay quejas de usuarios del transporte público de pasajeros que padecen el déficit en la cobertura del servicio de las empresas Exprebus, Tesa y Gutierrez. “Los colectivos no cubren las necesidades que se dan en las horas pico, a la mañana, al mediodía y a la noche”, denunció la docente Fabiana Argañaraz, de Alberdi.
Los transportes rurales cubren en parte esa carencia con un 70% de unidades antiguas y deterioradas. Y lo hacen con una tarifa superior a la de los ómnibus. Los fines de semana y feriados las penurias de los pobladores se agravan. “A veces uno permanece hasta dos horas esperando un ómnibus”, dijo Carlos Jerez, de Alberdi. El problema se profundiza en función de la distancia. Los vecinos de Alpachiri, Piedra Grande y El Molino, ubicadas al oeste de Concepción, también denunciaron que los domingos y feriados sufren la falta total de colectivos. Tampoco circulan los autos rurales. Los pobladores de Rumi Punco, en el extremo sur de la provincia, son los que más sufren la crisis. “Disponemos de una frecuencia mínima de colectivo. Y lo lamentable es que las empresas de servicio interprovincial no quieren parar en Rumi Punco”, aseguró.
Los vecinos de Villa La Trinidad también denuncian los padecimientos que deben soportar para viajar hasta Concepción.